miércoles, 8 de abril de 2009

Islanders de Villegas rozó la hazaña, pero con mucho esfuerzo en los tiros penales los mexicanos marcaron la lógica.


Ayer(martes 7 de abril del 2009) en el estadio Azul de la ciudad de México D.F. - México, el equipo mexicano de fútbol derrotó en penales por 4-2 a Puerto Rico Islanders(club donde juega el ecuatoriano-boricua, Peter Villegas), en el partido de vuelta de las Semifinales de la Liga de Campeones de Concacaf 2008-09.

En el encuentro de ida jugado en la isla caribeña de Puerto Rico, P. R. Islanders venció por 2-0 a los mexicanos.

En la vuelta el técnico mexicano, Benjamín Galindo alineó en los locales a:

Alfonso Blanco - Rogelio Chávez (Edgar Andrade, 50), Joaquín Beltrán, Julio César Domínguez, Fausto Pinto, Christian Riveros, Gerardo Torrado, Jaime Lozano (César Villaluz, 61), Gerardo Lugo, Pablo Zeballos, Angel Landín (Javier Orozco, 66).

El técnico del P.R. Islanders, el holandés Colin Clarke planteó a:

William Gaudette - John Krause, Nigel Henry, Cristian Arrieta, Kyle Veris, Scott Jones, Sandy Gbandi, James Marcelin (Domenic Mediate, 65), Noah Delgado, Josh Jansen (Kendall Jagdeosingh, 56), Nicholas Addlery (Peter Villegas, 74).

Desde el inicio del juego se notó como iba a desarrollarse el partido, con un Cruz Azul volcado al ataque en busca de revertir la derrota en el primer encuentro, mientras los visitantes eran un plantel muy tímido solo atinado a defenderse.

El juego de los Islanders era muy mediocre, mientras Cruz Azul, sin realizar un gran partido, tomaba el control de las acciones del mismo.

En el minuto 31, la máquina cementera(Cruz Azul) empezó a desesperarse en cada uno de sus ataques, por ello el paraguayo Cristian Riveros cuando se lanzó en busca de la pelota no midió la distancia de su barrida, llevándose, mediante una fuerte falta al portero Gaudette, por ello el árbitro le mostró la tarjeta roja, expulsándolo del partido. Ahora Cruz Azul debía seguir buscando la victoria por dos goles, pero con apenas 10 jugadores en cancha.

Cuando se jugaba el minuto 43, el paraguayo Pablo Zevallos recibió la pelota, luego remató desde fuera del área, marcando un golazo y el 1-0 a favor de Cruz Azul. En dicho momento la llave se encontraba con un marcador de 2-1 favorable a los caribeños.

En la segunda mitad el ritmo del juego seguiría siendo el mismo.

En el minuto 74, en el P.R. Islanders saldría el jamaiquino Nicholas Addlery para dar paso al ingreso del ecuatoriano-puerto riqueño, Peter Villegas. El objetivo de este cambio era mantener el balón en el poder de los visitantes y de esta manera permitir el transcurrir de los minutos y obtener la clasificación a la final de la Concachampios.

Pero en el minuto 83, Domínguez mandó un pase a Orozco, quien desde el centro del área remató cruzado y anotó el 2-0 a favor del Cruz Azul. La serie se empataba a 2.

El partido se iría a 30 minutos de prórroga.

En el minuto 1 del tiempo extra, Peter Villegas colocaría un pase corto al liberiano Sandy Gbandi, quien remataba desde fuera del área y lograba un golazo, el cual los aventajaba por 3-2 en la serie.

Siete minutos más tarde Villaluz aprovecha una duda defensiva del equipo boricua, para conectar de cabeza y poner el 3-1 en el partido, empatando nuevamente la serie a 3.

Cuando se jugaban los minutos de adición del segundo periodo extra, el portero estadounidense Gaudette salvaba espectacularmente a su equipo luego de un remate a quema ropa del autor del tercer gol local, Villaluz.

Luego llegarían los tiros penales.

Marcaría Zeballos para Cruz Azul; luego empataba el italiano Arrieta.

El segundo sería gol de Andrade; pegaba en el palo el remate del estadounidense Noa Delgado.

Torrado marcaba el 3-1; el jugador de Trinidad y Tobago, Kendall Jagdeosingh pondría la definición 3-2.

Edgar Lugo mandaba por arriba su disparo; pero el estadounidense Scott Jones definía muy mal y el balón se iba a la tribuna. Seguía el partido 3-2.

Luego anotaría Orozco y le daría la clasificación a la final a los mexicanos del Cruz Azul.
Puerto Rico Islanders quedó eliminado, pero demostró que a base de coraje y esfuerzo cualquier objetivo se puede lograr, ya que nadie se imaginaba hablar en este momento del Islanders peleando un pase a una final continental. Este equipo merece ser felicitado y animado a seguir con el trabajo serio que poco a poco le empieza a dar grandes satisfacciones deportivas.







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